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Miss Carbón: el valor de una lucha que trasciende lo personal

Miss Carbón (Argentina/España/2025). Dirección: Agustina Macri. Guion: Erica Halvorsen, Mara Pescio. Fotografía: Luciano Badaracco. Edición: Carla de Beauvoir, Vanessa Marimbert, Elsa Fernánd...

Miss Carbón (Argentina/España/2025). Dirección: Agustina Macri. Guion: Erica Halvorsen, Mara Pescio. Fotografía: Luciano Badaracco. Edición: Carla de Beauvoir, Vanessa Marimbert, Elsa Fernández. Elenco: Lux Pascal, Laura Grandinetti, Romina Escobar, Paco León, Agostina Inella, Jorge Román, Santiago Loy, Simone Mercado. Calificación: No disponible. Distribuidora: Moving Pics. Duración: 93 minutos. Nuestra opinión: buena.

La entrada de Carla Rodríguez a la mina de Río Turbio es un acto tan personal como político. Por lo menos así lo establece la segunda película de Agustina Macri, Miss Carbón, basada en la historia real de la primera minera de la cuenca carbonífera de aquella ciudad que desafió no solo las normativas establecidas de hecho para las mujeres en el mundo del carbón, sino el peso de la superstición y los prejuicios, a menudo más firmes y arraigados. Y ese proceso es, por un lado, cronológico e histórico -desde la adolescencia de Carla bajo la égida de un padre que la expulsa de la familia, hasta la conquista de su identidad bajo nuevas leyes en el orden nacional-, y por el otro, circular, en tanto su lugar se actualiza en el gesto de persistencia, en una lucha que trasciende lo individual y asume su condición colectiva.

Macri ya había conseguido en Soledad (2018) explorar las conexiones entre el personaje real -entonces María Soledad Rosas, proveniente de una familia argentina de clase media y convertida en una activista anarquista en Italia con una controvertida participación en atentados urbanos-, y sus resonancias históricas, que en ese caso involucraban las contradicciones entre pertenencia de clase e ideología política, pero también los posibles interrogantes sobre los vínculos entre padres e hijos, entre rebeldía y violencia. Lo importante en Soledad, más allá de la actuación de Vera Spinetta y los logros de la ambientación, consistía en esa dialéctica entre los orígenes familiares del personaje y su construcción como sujeto político.

Algo de eso se retoma en Miss Carbón, quizás con una envergadura más internacional en su producción -la presencia de Lux Pascal como protagonista, la coproducción con España- pero que intenta hallar menos respuestas que instalar ciertos debates esenciales. “Nacida y criada en la cuenca carbonífera”, se define Carli Rodríguez en más de una oportunidad, poniendo en diálogo las dos identidades que atraviesan su historia y a la película: como minera y como mujer. Sus primeros momentos tienen que ver con el desajuste: un padre que la echa de la casa familiar, la hostilidad por su apariencia, el hallazgo de un hogar en la comunidad travesti del lugar. Pero Carli sabe lo que quiere: trabajar en la mina. Y para ello presenta una solicitud, cumple con la burocracia médica, soporta miradas suspicaces y comentarios hirientes, y se viste con el mameluco.

Pero lo que sigue -más allá de los desvíos de un romance con un ingeniero de la mina, y algunas otras viñetas que no terminan de integrarse al devenir orgánico del personaje- es el desafío de combinar su identidad de género con una fuerte tradición que asegura que las mujeres no pueden ingresar a la mina salvo el 4 de diciembre, día de la fiesta del carbón. Es entonces cuando la película -desde el guion de Erica Halvorsen y Mara Pescio- despliega la complejidad de los vínculos que establece Carli con su medio laboral -como mecánica en el interior de la mina, pero también como administrativa en la superficie-, logrando anclar ese tiempo histórico -que tiene su hito en la sanción de la ley de identidad de género- en el personaje que decide representarlo.

Las contradicciones que definen a Carli son también -en la mirada de Macri y su película- las que definen a las sociedades, no solo a la argentina. Entre su pasado y su presente, entre avances y retrocesos, entre logros y claudicaciones. Cada historia es personal, como la de Carli, pero también es política, porque en cada sujeto individual se aloja el germen de la gesta colectiva.

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/espectaculos/cine/miss-carbon-el-valor-de-una-lucha-que-trasciende-lo-personal-nid02102025/

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